25 Mayo: África, un continente de lucha y superación

Cada 25 de mayo se celebra el Día de África, y en este día es necesario poner en valor los graves problemas a los que se enfrenta el continente, como la pobreza, el hambre, la injusticia, la violencia y la desigualdad.

 

Pero África es también el tercer continente más grande del mundo y uno de los más ricos en recursos minerales por lo que,  de igual forma, se debe reivindicar los avances socioeconómicos que han alcanzado, incluyendo su liberación del colonialismo y su actitud resiliente frente a la adversidad, su espíritu de lucha y su ímpetu superación.

La población africana es mayoritariamente joven y , como venimos observando en los últimos años, posee una gran capacidad de liderazgo y están generando propuestas muy interesantes y creativas desde sus roles como investigadores, activistas, innovadores y comunicadores para dar respuesta al enorme desafío que los nuevos tiempos les plantea pese a que la mayor parte de los países en los que viven se encuentran en vías de desarrollo.

La falta de recursos hace que, mucha de su población, opte por la migración hacia Europa como una de las vías de escape de la pobreza. Una situación que se agrava debido a los efectos del cambio climático: La desertización que deja a los africanos desprovistos de alimento y trabajo agrario o  la dificultad de acceso a agua potable, que sigue siendo un lujo ya que 300 millones de personas en el continente no disponen de este recurso vital para la salud.

25 de mayo, una jornada perfecta para visibilizar y reivindicar el papel de la cooperación internacional en la lucha contra las desigualdades.

La salud de las mujeres, la violencia de género, la atención en salud sexual y reproductiva de población juvenil, el fortalecimiento de los servicios de salud locales, la salud comunitaria y fomentar la participación ciudadana en la toma de decisiones para la mejora del acceso a la salud, son puntos fundamentales del trabajo que Medicus Mundi Sur realiza en cooperación y acción humanitaria sobre todo en países del África subsahariana.

Un plan de trabajo que se basa en los derechos y valores humanos y la equidad de género y gracias al cual se han implementado proyectos para avanzar en la atención primaria de salud en el continente africano, con una especial incidencia en la atención sanitaria a mujeres desde un enfoque de salud y derechos sexuales y reproductivos.  Con el objetivo de reforzar los sistemas públicos de salud en países como Burkina Faso, Mali, Mauritania, Marruecos  y poder garantizar la continuidad de los cuidados  de calidad sobre todo en un contexto de crisis sanitaria como es el que ha generado la COVID-19.

La atención multisectorial a víctimas de violencia basada en el género (VbG) en Burkina Faso o Mauritania  o  la sensibilización sobre derechos laborales y sociales con enfoque de género de trabajadoras de fábricas textiles en la ciudad de Tánger-Marruecos, son  otros  de los  aspectos importantes  de la labor que Medicus Mundi Sur realiza en sus proyectos de cooperación en estas zonas del planeta  y que tratan de abordar  determinantes sociales de la salud más allá de la mera atención sanitaria.

El empoderamiento de la mujer africana y la reivindicación de sus derechos son el eje fundamental de proyectos como el que estamos realizando en contra la mutilación genital femenina (MGF) y el matrimonio infantil en la Yanfolila (Malí) donde colaboramos con actores locales fuertemente implicados en la erradicación de estas prácticas tradicionales nefastas cuyo abordaje se ha visto relegado durante el periodo de pandemia. Del mismo modo, estamos apoyando al Ministerio de Salud de Malí en la mejora de la atención a niños y niñas con problemas de malnutrición aguda severa (MAS) en la región de Mopti, cuya situación se ve complicada por la situación de conflicto armado que vive extensas zonas del Sahel.

Desde Medicus Mundi queremos que este Día de África 2022 sirva para que reflexionemos sobre las dificultades que atraviesan estos países, los retos y desafíos que se les plantean en un futuro próximo y el papel debemos seguir jugando las organizaciones sociales en la lucha de los más empobrecidos y vulnerables.

 

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